La accesibilidad es un elemento diferenciador de calidad de vida. Cada uno de nosotros puede tener en algún momento alguna diversidad funcional, es decir, alguna discapacidad física, psíquica o sensorial, ya sea permanente o temporal que nos haga sufrir las barreras arquitectónicas de nuestro entorno.
El espacio urbano es el escenario que debe favorecer que todas las personas al margen de sus capacidades y actitudes puedan desenvolverse en el entorno de forma segura libre e independiente. Con un buen trabajo, lo que es una necesidad para algunos, será un beneficio para todos.
Los vados peatonales, los alcorques, los bancos y el resto del mobiliario urbano pueden convertirse en barreras para los viandantes si no están debidamente estudiados tanto en su ubicación como en su diseño.
Trabajamos para particulares, comunidades de propietarios y administraciones públicas auditando los espacios urbanos y redactando planes de accesibilidad.
Un correcto diseño de los espacios no encarece los proyectos. Aportamos nuestro conocimiento y experiencia para la mejora de espacios urbanos como son calles, plazas, parques, zonas comunes de edificios y espacios deportivos (polideportivos, piscinas, etc.).